El historial de deudas y su conocimiento son fundamentales para un uso consciente de los recursos de que disponemos y nuestra capacidad de crédito. ¿Quieres saber más? Aquí te damos más detalles sobre esta documentación.
¿Qué es el historial de deudas?
El historial de deudas es un recuerdo de todas aquellas deudas que tenemos pendientes de pago. Ojo, aunque es indudable que influirá en nuestra capacidad crediticia, no es un informe de riesgo. Para conocer nuestro historial en deudas, por lo general, habrá que buscar en distintas instancias, tanto privadas como públicas. Por desgracia, aún no existe un registro central que incluya las deudas con acreedores privados con aquellas que tienes con la Administración.
Como principio general, es muy importante recopilar todas tus deudas como punto de partida e información para buscar soluciones. Sobre todo, porque si buscas una exoneración, tendrás que proporcionar toda la documentación y, además, se exige que, como mínimo, tengas dos acreedores distintos.
¿Qué debes saber sobre el historial de deudas?
Los historiales de deudas se pueden conseguir de varias maneras y, muchas veces, estas son complementarias. Aquí te indicamos las principales opciones de que disponemos para saber cuál es el punto de partida:
1. CIRBE (Banco de España): la Central de Información de Riesgos del Banco de España (CIRBE) proporciona todo lo necesario para conocer los créditos y préstamos que has contraído. Sin embargo, es un informe de riesgos, no es un registro de morosos propiamente dicho. Eso sí, como primer paso, y si tienes dudas, es una forma de recopilar información de utilidad.
2. Entidad financiera con la que trabajamos: hablar con la entidad financiera con la que trabajamos habitualmente es una opción para conocer qué deudas tenemos pendientes. En algunos casos, la propia entidad financiera puede hacer esa gestión si tiene intereses directos, a través de Experian, que hace un trabajo de recopilación de información. Además, tienes que saber que, muchas veces, la entidad está dispuesta a hacer gratis la gestión.
3. Registros de morosos (ASNEF y RAI): esta suele ser la forma más efectiva de saber si debemos dinero a acreedores privados, aunque son tres instancias diferentes. El fichero ASNEF, que es el más conocido, está concebido para acreedores privados. El Registro de Aceptaciones Impagadas (RAI) es para empresas o autónomos. La consulta puede ser gratuita o con un coste simbólico, de manera que, en caso de duda, compensa comprobar.
4. Administración (Agencia Tributaria, Seguridad Social, Autonomías y Ayuntamientos): aquí puedes pedir directamente un certificado a cada Administración para que te confirmen si debes o no una cantidad. De esta forma, te ahorrarás dudas y problemas. Aquí sí que podemos señalar que la gestión ante las administraciones es gratuita.
Como acogerte a la Ley de la Segunda Oportunidad (LSO) para poner fin a tu problema de deudas
La Ley de la Segunda Oportunidad (LSO) es una opción de eliminar para siempre tus deudas. Y, afortunadamente, hoy las personas que se acogen a esta posibilidad no deja de aumentar año tras año. Se calcula que más de 15.000 personas ya se han beneficiado de esta legislación.
Es bueno que sepas que de esta ley pueden beneficiarse, indistintamente, particulares y autónomos. Y, siempre que seas mayor de edad, tienes que cumplir con determinadas condiciones: no deber más de 5 millones de euros, tener más de un acreedor, demostrar que contrajiste la deuda de buena fe, que no exista la posibilidad real de pagar y que sea la primera vez que te acoges.
¿Cuáles son las ventajas de esta ley? Básicamente, que puedes pedir que borren de un plumazo tus deudas para siempre mediante el Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI), con sentencia judicial. Otra posibilidad es la de que te eliminen parte de la deuda, que retrasen el pago y que puedas conservar tu vivienda habitual. Con la última reforma de la Ley Concursal, las condiciones han mejorado mucho.
La idea es que estés representado por abogado y procurador, que presentará directamente el expediente con la documentación al Juzgado de lo Mercantil. No en vano, hoy se han reducido mucho los plazos y se han rebajado los costes porque ya no es necesaria la fase inicial de mediación con los acreedores. En un plazo de entre 8 y 14 meses, es posible tener una sentencia definitiva.
La exoneración de las deudas implica muchos beneficios. En primer lugar, no tendrás que pagarlas y, en la práctica, será como si no existiesen. La segunda ventaja es que tu situación crediticia mejorará. Y, finalmente, tendrán que darte de baja de los ficheros de morosos.
Elimina tus deudas para siempre gracias a la Ley de la Segunda Oportunidad
Eliminar el historial de deudas es posible y así podrás respirar. ¿Cómo? Gracias a la Ley de la Segunda Oportunidad (LSO). En Ecualitas nos encargamos de recopilar la documentación y tramitar el proceso para que digas «adiós» para siempre a esas obligaciones. ¡Llámanos y te explicamos cómo hacerlo!